Como en todos los deportes, cuanto
más riesgo tomemos más protección necesitamos, y para eso os comentaré las
diferentes protecciones que existen para este deporte.
El casco es uno de los
principales elementos que debemos llevar para practicar este deporte y sobre
todo si las condiciones son más arriesgadas o si somos principiantes y tenemos
facilidad para caer.
La moda habitual en el snow es
llevar gorros llamativos y provocadores, que están muy bien y es divertido pero
la mayoría no proporcionan ningún tipo de protección, y a no ser que seamos muy
expertos o estemos seguros de que en la ladera no hay ningún tipo de obstáculo
y la nieve está blanda, no es de lo más
recomendable.
Existen varios tipos de casco por
el material de protección, con protección o recubrimiento rígido para las
orejas, e incluso con accesorios tipo bluetooth o visera incorporada. Bien es
cierto que al final es mejor el que más cómodo/protector nos resulte. Hay
factores a tener en cuenta ya que uno cerrado (velocidad, competición) es más
caluros y la audición es menor que abierto o si usamos diferentes gafas de
ventisca dependiendo del sol tal vez la visera no nos resulte útil, por ello
debemos elegirlo según gustos pero respetando las siguientes indicaciones.
Lo primero que debemos ver es la
talla, que al fin y al cabo es una cosa personal porque no hay dos cabezas
iguales. Así que aunque midas tu cabeza y tengas clara la talla, lo mejor es
probar y ver como te queda. No debe quedar ajustado ni muy suelto ya que en
ambos casos además de contraindicado en molesto. Y la cinta de sujeción tampoco
debe apretarnos mucho por que no va a hacer mejor su trabajo por mucho que se
apriete.
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